Abadía de Port-Royal
La Abadía de Port-Royal se fundó en 1204.
La Abadía de Port-Royal, que llegó a ocupar un lugar destacado del espíritu francés en el siglo XVII, fue suprimida en 1709.
Este edificio fue declarado Monumento Histórico en 1947.
La Abadía de Notre-Dame de Port-Royal se compone de: cercado, cementerio, patio, claustro, jardín, estanque, iglesia, capilla, dependencias, partes agrícolas, palomar, taller y recinto.
"Nada hubiera llamado particularmente la atención sobre la humilde abadía cisterciense de Port-Royal, fundada a principios del siglo XIII, si su joven abadesa, la madre Angélique Arnauld, no la hubiera reformado de manera ejemplar en 1609 y si treinta años después, la comunidad no hubiera elegido al abad de Saint-Cyran como director espiritual.
Con él, Port-Royal iba a entrar en el movimiento jansenista. (...) Esta corriente de pensamiento marcó profundamente una parte de catolicismo francés del siglo XVII.
El prestigio personal del abad de Saint-Cyran, que también lideraba varios miembros de la alta aristocracia opuesta a Richelieu, causó la ira del cardenal-ministro. Lo mandó encarcelar durante cinco años en Vincennes.
A partir de este momento, el aspecto político del "asunto jansenista" llegó a ser tan importante como el problema religioso: Ana de Austria, Mazarin y sobre todo Luis XIV vieron en cada jansenista un oponente al poder monárquico absoluto. (...) Paralelamente a sus trabajos intelectuales, algunos de ellos se encargaron activamente del huerto y de la explotación.
Pero el movimiento jansenista no dejó de sufrir las persecuciones, de distintas formas y con algunas interrupciones: el juicio del gran Arnauld en la Sorbona que conducirá a las Provinciales, la dispersión de los alumnos de las "Petites Ecoles", la primera "gran persecución" contra el monasterio (1665-1669) y el encarcelamiento del Sr.
De Sacy en la Bastilla. Alcanzaron su apogeo con la bula de extinción de la abadía de Port-Royal-des-Champs, la dispersión de las últimas monjas en 1709 y la destrucción de la iglesia y de los edificios del monasterio dos años más tarde".
Extracto de un artículo sacado de Toutes les Nouvelles (Todas las Noticias) con fecha del 05/10/1988, redactado por Thérèse Picquenard, conservadora del Museo Nacional de Granges de Port-Royal. Cien peldaños conectan la abadía a los edificios ocupados por los Solitaires.
